Dandies entre basura

Hacía tiempo que no subía a la buhardilla del lirón. La puerta rechinó como de costumbre, tal vez un poco más que de costumbre y volví a abrir el viejo arcón en el que guardo mis más preciados bienes, un arcón mágico en el que además de recuerdos se encuentran tesoros que algún ratoncito caprichoso me deja como regalo a cambio de unas chocolatinas a falta de dientes de leche.

El regalo tenía una vez más forma de disco y lo firmaban Los Negativos. ¿Qué mejor razón para desempolvar mi viejo blog que esta nueva entrega de las aventuras de nuestros exploradores con botines y foulard?